Este humilde Porcobravo de a pie os desea unas felices fiestas a todos.
Que Papa Noel y los Reyes os traigan todo lo que les hayáis pedido, bien sean regalos, carbones, bananos o salchichones.
Y que el 2.016 os sea excelente en todos los sentidos.
Para mi el 2.015 fue un año formidable. El año de mi primer viaje con la manada, el año de mi debut con la negra. Inolvidable.
Al 2.016 entrante solo le pido salud y que me respeten las lesiones para poder luchar dentro de seis meses en la XIII.
Me dejaré la piel y la sangre para ganar la copa, el L.B y para llegar a ser delfín.
Bo Nadal, Cidoncha
ResponderEliminarBo Nadal motherfuckers
ResponderEliminarOtra vez llega la navidad, la gente emana felicidad todos sonrien sin parar, ¿a quien pretenden engañar? si todo sigue igual…
ResponderEliminarEs navidad en Jerusalen, y en navidad matan tambien Jesusito ya va a nacer,que te pille un palestino ¡cacho cabron! y que te cuelge de un pino.
El gran negocio va a comenzar, los precios por las nubes estan todos como locos a comprar, todo sea porque es navidad y hay que aparentar, ¡anda ya!
Turron, un pavo y champan, eso no nos puede faltar aunque mañana no haya para comer, todo sea porque es navidad y hay que aparentar.
Los pobres niños son machacados por la television, por miles de anuncios(de juguetes), en los que el niño solo tiene que apretar un boton, y para nada cuenta su imaginacion.
Por eso y mas ¡me cago en la navidad! puta navidad ¡me cago en la puta navidad!
Millones de abetos cortaos, por una estupida tradicion, que luego acabaran tirados, en la basura, en cualquier lado, luces por toda la ciudad, para intentarla disfrazar, anuncios de paz y hermandad, que despues ya de nada valdran
Por eso y mas ¡me cago en la navidad! puta navidad ¡me cago en la puta navidad!
Por eso y muchas cosas mas me cago en la puta navidad! de verdad que asco me da tanta hipocresia, tanta falsedad, venga idiotas a comprar, el consumo es el espiritu de la navidad ¡os vamos a sacar hasta la medula espinal! ¡feliz falsedad …amiguitos!
Las lúlulas agitean ponpuronas
ResponderEliminareritean, eritean.
Las lúlulas durumbean ya
dubean, dubean.
Busca un nuevo loco
ResponderEliminarNo sigas a los líderes
Vigila los parquímetros
Nunca
ResponderEliminarquise mariposas clavadas en un cartón; busco una ecología
poética, atisbarme y a veces reconocerme desde mundos
diferentes, desde cosas que sólo los poemas no habían
olvidado y me guardaban como viejas fotografías fieles. No
aceptar otro orden que el de las afinidades, otra cronología
que la del corazón, otro horario que el de los encuentros a
deshora, los verdaderos
Odio las ideologías que prometen el paraíso en la tierra y no cumplen. Odio a los presidentes que envían a hombres que no conocen a tierras que también ignoran por una causa en la que no creen. Odio a los lideres por creer saber lo que les conviene a otros y a los sumisos que no se lo preguntan.
ResponderEliminarOdio a esas parejas que se toman de la mano y se sienten en la gloria. Gloria de dos tontos que no se dan cuenta de que después de Adán y Eva, el amor es el hecho más vulgar que existe ¿O es que acaso ha habido alguien que no haya amado?
Odio a las personas que no leen y creen que Benedetti es él de la cadena de pizzas.
Odio a la religión pero no por Dios, sino por todos los muertos, por los aprovechados que se hacen llamar “sacerdotes”, y los ingenuos que creen que habrá una vida después de esta.
Odio a la tía que me pregunta por la novia que nunca existirá y a su marido que trata de convencerme de la necesidad del matrimonio para asegurarse una vida feliz.
Odio a Kant por sugerir que tenemos “el deber de hacer el bien a otros” y a Sartre por decir que a final de cuentas “la decisión de ser buenos depende de uno mismo”.
Detesto cuando me corrigen al decir mal una palabra extranjera, aunque después no me soporte a mi mismo por juzgar mal a quien solo a querido hacerme un favor. También detesto a quien saca a pasear a su perro y no levanta sus deshechos (he pensado muchas veces en seguirlos hasta sus casas y defecar en su entrada). Odio a los locos y a los cuerdos también.
Si quieres ganarte mi desprecio solo tienes que hacer cualquiera de estas tres cosas: hablarme de fútbol (cuando eso pasa siempre me digo a mismo aquella famosa frase de Borges “el fútbol es popular, porque la estupidez es popular”), decir obviedades cuando estoy viendo una película (al estilo de ¿ya se murió? cuando el personaje ha recibido 5 balazos) y el peor de todos, interrumpirme cuando estoy inspirado.
No soporto a quienes caminan lentísimo en las calles, menos aún cuando son tantos que no permiten rebasarlos. Odio los bancos y sus filas; el verano y sus camisas sudadas; el café express y quemarme la lengua cuando le doy un trago. Desconfió de los hombres bondadosos, de los comerciales que venden la panacea, de los poetas, de la política y de mi psicoanalista.
Me irrita la gente sin imaginación, la gente que vive para el escándalo y la que no se pregunta por el porqué de las cosas. Me dan lastima los que no tienen vicios (siempre he pensado que la vida se les ha de hacer larguísima), pero se me quita cuando estos dicen ser mejores que los que si tienen. Por el contrario amo las personas que no temen reírse y parecer absurdos, los que persiguen causas perdidas y los que platican y no ven el reloj. Y por ultimo solo conozco 3 placeres que defenderé con mi vida, pues sin ellos, prácticamente estaré muerto: el placer de decir lo que pienso, el de elegir a las personas que quiero que sean mis amigos, y el ser curioso por todo.
las potas en las calles, las uvas atragantadas, los zombies volviendo a casa en zigzag.
ResponderEliminarque bonitas son las mañanas del añonuevo
Eres como una llama azul ¿verdad, hijo? Eres joven, mudo y lleno de esperma. Lo sé
ResponderEliminarmaitreya uvaca tad evam akarnya jalesa-bhasitam maha-manas tad viganayya durmadah harer viditva gatim anga naradad rasatalam nirvivise tvaranvitah
ResponderEliminarPregunta - (...)¿Es el cristianismo la raíz de todo mal, como mencionaste recientemente?
ResponderEliminarRespuesta- No, el judaismo es la raíz de todo “mal”, por usar tu palabra, y tanto la cristiandad como el islam derivan de esta así llamada "religión". El cristianismo no fue sino un instrumento para convertir a los europeos en esclavos de la voluntad judía, y hoy nosotros –los europeos- nos hemos vuelto tan débiles, rotos y arruinados por todos esos años de cristiandad, que ellos ya ni siquiera lo necesitan. Aceptamos los intereses. Aceptamos que el dinero –su verdadero Dios- es nuestro verdadero Dios. Los aceptamos a ellos y a todo lo que hacen. Aceptamos que nos conviertan en esclavos. Aceptamos vivir en sociedades donde pronto no quedará ninguna libertad. Y no quedará libertad alguna porque lo hemos sacrificado todo para comprar "seguridad" para nosotros mismos, o eso pensamos. Esta “seguridad” que de algún modo creemos necesitar porque ellos vinieron con su fingida “guerra contra el terror”, y sólo porque ellos han permitido a miles y miles de musulmanes vivir entre nosotros – para amedrentarnos y hacernos aceptar lo que sea que sugieran para “protegernos” de los terroristas. Olvídate de “1984” de Orwell, esto es mucho peor…
Cuántas cosas con la banderita española le habrán regalado a Cidoncha??????
ResponderEliminarvuelve gordo que ya estamos en 2016
ResponderEliminar¿qué hay de Liberty Meadows en tu deriva?
ResponderEliminarEl decrecimiento, utopía razonable y paradójica, requiere de la energía y la creatividad social para concretarse. Debe movilizar las iniciativas de los individuos y grupos para construir las sociedades decrecentistas imaginadas. El decrecimiento requiere de la innovación social para construir los mundos alternativos con los que sueña.
ResponderEliminarPor su parte, la innovación social, lugar de la creatividad y la inventiva común, ha sido colonizada por el discurso y las practicas productivistas. Debe salir de allí, socializarse y confiarse a la guía utópica del decrecimiento. La innovación social requiere del decrecimiento para orientar sus pasos hacia el bienestar de las mayorías.
ahora ya puedes volver a escribiir