28 de Septiembre de 2.017
Hola a todos.
Vuelvo al frente después de mi tradicional (los buenos ejemplos de nuestro MAIN, hay que copiarlos fielmente) retiro veraniego.
Esta vez no os voy a aburrir con mis historias estivales, estoy madurando y entiendo que lo que pase en estos meses de meditación y contemplación debe quedar entre mi banano y yo.
Bien es cierto, que la derrota en la última edición de la AGCUP, hace que las maragotas escapen y que sea más difícil pescar una buena pieza.
Bueno..., ¡coño, lo reconozco!, que vosotros sois mis camaradas y colegas de viajes y no os puedo ocultar nada, que en todo el verano, por mucho que vestí simbología porcobrava, no pude cazar ni un triste parrús para mi colección, nada, ni siquiera alguna guiri perdida con más de cinco copas encima, quiso fozar conmigo.
Pero con la llegada del otoño, parece que mi suerte ha cambiado un poco.
El otro día en la fiesta del X aniversario,...si claro que hubo una fiesta....ahhh vale que no estabas invitado.....bueno, a ver me explico un poco, que ahora una vez pasada ya no creo que sea tan importante mantener el secreto.
Se celebró una fiesta para conmemorar el X aniversaryo del engendro, quiero decir glorioso nacimiento de la Anglo Galician Cup (AGC).
¿No estabas?, bueno , no te preocupes, no todo el mundo puede entrar en según que eventos, esto era para gente guapa e importante del chorromoco:
Porcos originales, gente que viajó al menos un par de veces, músicos, delfines, adláteres y correveidiles, decapitados y ahorcados a orillas del río Bann, veteranos de Yardley Gobion, topos, personajes deturpados, restos vivientes de personajes purgados durante estos diez años, ingleses afincados, Willy y abejas mayas, bebedores de cerveza de grosella, representantes de las once peñas porcobravas, alcaldes de las ciudades que acogieron la competición, ...por supuesto el mismísimo MAIN.... y para compensar tanta desfeita, mucha niña mona.
Un fiestón regado a base de bien con cerveza NASA, (cuyo representante por cierto, prometió una generosa ayuda económica y de camisetas para el próximo viaje, a cambio de ser los embajadores de tan preciado brebaje en tierras sajonas), música en directo a grandes decibelios, discursos de los alcaldes que se peleaban por ser la sede de la próxima edición y todas las sorpresas y novedades que adelantó el MAIN para esta temporada 17/18 y que ya irá desgranando en sus emains semanales.
Y bebiendo pintas y pintas y charlando con muchos de los insignes invitados, killer, Zipi y Zape, Barrilete, los Rivers, Marathon Marcos, George Best, el Yosua, Argie, Fandi, los sufridos seguidores y los que ponen la banda sonora de la AGC, el alcalde capitalino que me prometió a la décima vez que la próxima edición nos dejaría Pasaron, y algunos invitados que no conocía y que querían sacarse fotos conmigo, cuando de repente... la vi, allí quieta en una esquina, un personaje angelical..., una belleza tan dulce..., era como una joya de un tesoro perdido en el fondo del mar, a la que merodeaban un par de tiburones.
Si, amigos, ahora era verdad, la había encontrado, sentí que aquella delicada criatura, sería mi flor fresca de la primavera, mi sol de verano que calentaría mi corazón, mi viento de otoño que acariciaría mis mejillas, mi lluvia de invierno que limpiaría mi alma.
No lo pensé, me lancé a por ella, empujé a un par de tractores que se interponían en nuestro camino, espanté a los tiburones con un simple gesto, enseñándoles el escudo porcobravo que llevaba en la camiseta, la agarré de las manos, le miré a los ojos, estaba ya preparado para soltarle "puedo escribir los versos más tristes esta noche..." o " Dos cuerpos frente a frente son a veces dos olas y la noche es océano..." abrí la boca y ....
-¿Quieres salchichón galego?-le solté- pero del bueno, eh?, banano de categoría superior
Oh, NO, joder, otra vez me había pasado, pero como dije esta mujer era especial, sonrió y me dijo con una voz muy suave:
- Quizás en otro momento, en otra vida.
Y luego se deslizó desapareciendo entre la multitud.
Fue mágico, romántico, ni patada en los huevos, ni escupitajo en la cara, solo aquella sonrisa.
Pregunté por allí si alguien la conocía, pero nadie me pudo decir nada sobre ella.
Desde entonces apenas como ni duermo, ya no tengo ilusión por la XV, no me apetece salir, ni entrenar, ni ir a las pachangas, por no tener, ni ganas tengo de entrar en mis páginas favoritas del ordenador para aliviarme
Así que si alguien la conoce, por favor que no dude en ponerse en contacto con vuestro ensimismado y bucólico servidor..
