EL REGRESO

14 de Septiembre de 2.015

Así es, el regreso, el duro regreso a la normalidad después de unas largas vacaciones.

Un verano muy duro y que ha consistido basicamente en: cubatas, cervezas, comidas, cervezas, comidas, cenas, cubatas, comidas,  cervezas, comidas, cenas, cubatas, cenas, cubatas, comidas,  cervezas, comidas más cervezas....Si, sí, lo sé, me he descuidado un poquito, lo admito, me he dado cuenta esta misma mañana cuando estando de pie apenas me veía las uñas de los dedos gordos de los pies. Y ya no digo nada de la varita del amor, que sé que está ahí porque la noto por las mañanas al despertarme, pero que hace tiempo que no tengo contacto visual con ella.

Por otra parte, ha sido mi  primer verano como Porcobravo, y se ha notado, y mucho. Las chicas ya no me miran igual que cuando era un simple aspirante, ahora notan en mi, una cierta madurez y me ven como  una persona con una experiencia vital muy interesante. Eso con las nativas, que en cuanto detectan a un machote con una camiseta con un porcobravo, se les derrite el parrús.

Y que decir de las guiris... he tenido la posibilidad de practicar con ellas mi inglés con acento de Sheffield y de Newcastle y se ponen como motos. Con deciros que estuve a puntito un par de veces de darles a probar banano del bueno...Por ejemplo, a una irlandesa que ya tenia la crica echando humo y estaba a nada de ponerla a veinte uñas, no pude darle el ansiado salchichón galego, porque cuando fui al cajero a buscar pasta para seguir pagándole whiskies, aprovechó para liarse con un par de maromos que por allí estaban al acecho. Pero a puntito estuve, eh?, a puntito.



Y a ver, que no todo es juerga, que también he entrenado un poco, hemos tenido el partido amistoso ese de Julio, y que me ha servido para darme cuenta que si yo estoy mal, el resto no está mucho mejor físicamente.
Físicamente digo, porque carallo, a papar y a  beber cervezas y cubatas, bien entrenados que están. Vaya ritmo. Por cierto, como me chivaron que este diario, al menos, tenía una persona que lo seguía, un saludo para ella.

Volviendo al partido, y a falta de confirmar cuando vienen los ingleses a disputar la XIII, mucho, mucho, tenemos que entrenar, para que no ocurra una auténtica desfeita y todo este honor porcobravo, que tanto ha costado construir se desmorone por completo.

Yo, por mi parte, prometo, y si, ya sé que en la última edición no fui muy consistente con el entrenamiento, prometo , que para cuando vengan los Stags, pueda levantarme y verme la mitad de los pies y al menos la puntita de la pilila.

Pero eso ya será dentro de unos días, ahora como mandan los cánones tengo que tomarme unos días de reposo para descansar de las vacaciones.